2.1. Leyes de la Ecología
*Ley del Mínimo
La presencia y éxito de un organismo depende de una serie de condiciones. En condiciones estables, el material básico disponible en las cantidades más próximas al requerimiento mínimo tiende a ser limitante, concepto que se ha difundido como ley del mínimo del Liebig.
Liebig fue uno de los
pioneros en el estudio del efecto de diversos factores sobre el crecimiento de
las plantas. Descubrió, que el rendimiento de las plantas suele ser limitado no
solo por los nutrientes necesarios en grandes cantidades, como el dióxido de
carbono o el agua, que sueles abundar en el medio, sino por algunas materias
primas con el cinc por ejemplo, que se necesitan en cantidades diminutas pero
escasean en el suelo.
La afirmación de Liebig
de que “el crecimiento de una planta depende de los nutrientes disponibles solo
en cantidades mínimas” ha llegado a conocerse como la ley del mínimo de Liebig.
Ley de la Tolerancia de Shelford
No solo las cantidades
minúsculas de alguna sustancia pueden ser un factor limitante, según propuso
Liebig, sino también el exceso, como sucede con factores como el calor, la luz,
y el agua. En consecuencia, los organismos tienen un mínimo y un máximo
ecológicos; la gama de concentraciones situadas entre esos extremos representa
los límites de tolerancia.
Algunos de los
principios adicionales de la ley de la tolerancia se anuncian como sigue:
1.- Los organismos
pueden tener una gama de tolerancia muy amplia para un factor y otra muy
estrecha para otros factores.
2.- Los organismos con
gamas de tolerancia amplias para todos los factores para todos los factores son
los que tienen mayor oportunidad de distribuirse extensamente.
3.- Cuando las condiciones no son óptimas para
una especie respecto a un factor ecológico, los limites de tolerancia suelen
reducirse en lo que respecta a otros factores ecológicos.
La adaptación es la
manera en que los organismos se adecuan al medio en que viven; es decir, la
constante lucha por sobrevivir y existir. Dicho en otras palabras, la
adaptación es el cambio evolutivo de los organismos para resolver los problemas
que les plantea el ambiente a fin de ajustarse a él, de la manera más eficaz y
armónica. En este proceso el resultado final es que el organismo se vuelve más
apto o mejor adaptado y, por lo mismo, tendrá más posibilidades de sobrevivir.
Las adaptaciones más
evidentes son las morfológicas, como es el caso en que las extremidades de los
peces primitivos los cuales se modificaron para invadir el medio terrestre, lo
cual se reflejo en los futuros evolutivos de aves, mamíferos y reptiles.
Otro tipo de adaptación son
las fisiológicas, en las que los organismos alteran la fisiología de sus
cuerpos, órganos o tejidos para resolver algún problema que se les presenta en
el ambiente. Tal es el caso de las jirafas, con vasos sanguíneos modificados
que funcionan como válvulas que sirven para controlar el flujo sanguíneo cuando
la jirafa baja la cabeza; sin estas válvulas la presión de la sangre reventaría
los vasos y capilares del cerebro del animal.
El mimetismo o camuflaje
al que recurren algunos organismos como las mantis, las cebras, las mariposas,
las mantarrayas, los peces arrecifales, entre otros muchos, tiene como fin
escapar de sus depredadores.
Las adaptaciones
relativas al comportamiento están bien representadas por las actitudes de
agresión y por la cúpula que tienen los animales, la migración es otra
adaptación más que utilizan algunos organismos para buscar ambientes más
propicios y sobrevivir.
2.3. Relaciones de
comunidades y poblaciones
Las interacciones entre
dos poblaciones pueden llevarse a cabo de ocho maneras según Odum (1962); esta
relación puede ser con o sin acción reciproca, en la cual una población puede o
no afecta a la otra, puede inhibirla, favorecerla o bien el efecto puede ser
nulo.
*Neutralismo: es cuando
dos poblaciones se asocian sin que ninguna de ellas salga afectada: como
ejemplo se detiene el caso de dos especies de peces de ornato (gupi y pez gato)
que viven armónicamente en una acuario. Ninguna de las dos sale afectada porque
tiene un comportamiento, hábitos alimenticios, y necesidades diferentes que no
las hacen competir. Ocupan el mismo hábitat, pero no luchan drásticamente por
el alimento y el espacio.
*Competición: esta
ocurre cuando las dos poblaciones que entran en relación compiten por el
espacio, los alimentos o alguna otra necesidad. En este caso una de ellas
siempre afecta adversamente a la otra. Esta relación biológica es el caso
universal de las especies que compiten para sobrevivir; el ejemplo más común es
el del hombre, que ha ido afectando la presencia de algunos animales y
vegetales en su lucha por obtener
alimentos, energía, leña, vestido, etc.
*Mutualismo:
Se da el caso de
mutualismo cuando en el desarrollo y supervivencia de dos poblaciones ambas se benefician,
no pudiendo subsistir la una sin la otra.
Ejemplo: las polillas
comedoras de maderas tienen en sus intestinos protozoarios degradadores de
celulosa; gracias a estos, las polillas pueden alimentarse con loa azucares
provenientes de la degradación de la celulosa de la madre y por otra parte, los
protozoarios obtienen un lugar adecuado para vivir en el intestino de la
polilla.
*Cooperación:
Las dos poblaciones
asociadas se benefician, pero la relación no es obligatoria: las aves que se
alimentan de los parásitos que viven en las orejas, boca, nariz o lomo de las
vacas se benefician al alimentarse de los insectos, y las vacas también los
hacen al quedar libres de los parásitos. Sin embargo, no pasa nada si, por
alguna razón, la relación no pudiera darse; es decir, tanto las aves como las
vacas pueden hacer su vida .independientemente, sin afectarse adversamente por
la falta de la una o de la otra.
*Comensalismo:
Cuando dos poblaciones
están en contacto, una de ellas se beneficia pero la otra no resulta afectada
como consecuencia del beneficio que obtiene la primera. Por ejemplo, la
relación entre cualquier organismo (comensal) no invitado, que se aloja en las
conchas de caracoles, ostiones o almejas; aunque vive dentro o sobre la concha,
no afecta al molusco (hospedero)
*Amensalismo:
En una interaccion, una
de las especies es inhibida y la otra no es afectada. Los “tenchos” (bromelia
sp) son plantas de entre 15 y 50 cm. Que parecen pequeños magueyes y viven
sobres las ramas de algunos árboles. Durante esta relación puede llega a
ocurrir que el “tencho”, aunque no es parasito, se reproduzca tanto sobre el
árbol que puede llegar a perjudicarlo; así, es posible ver árboles secos o
inhibidos por efecto de la alta densidad de la población de “tenchos” sobre sus
ramas.
*Parasitismo y Depredación:
Finalmente, estos dos
tipos de relaciones se presenta el caso en que una especie afecta nocivamente a
la otra, pero no puede vivir sin ella. En el parasitismo una especie es la
parasita y vive dentro o sobre la otra, afectándola (parasito intestinales,
piojos, en el caso del hombre). En cambio, en la depredación una población
ataca, atrapa, mata y se alimenta de la segunda, afectándola, como es el caso
de las águilas que se alimentan de diversas presas. En ambos casos el organismo
que afecta (depredador) no puede vivir sin el organismo afectado.
La función de relación
permite la supervivencia del individuo en el medio que habita.
Esta función incluye la
percepción de los cambios de su entorno, y todos los procesos que controlan el
normal funcionamiento interno del organismo (la respiración, el latido del
corazón, el crecimiento, etc.). El ser vivo presenta un sistema de coordinación
que permite la ejecución de sus funciones vitales.
En un ser vivo, las
funciones de relación suelen estar definidas por la presencia en su cuerpo de
determinados tipos celulares especializados.
En los organismos
pluricelulares existen células que perciben lo que sucede a su alrededor,
células especializadas en procesar esta información y, finalmente, otras
células que elaboran unas respuestas adecuadas.
En el caso de los
animales, los procesos que tienen lugar en el cuerpo están controlados por el
sistema nervioso y el sistema endocrino.
En los organismos
unicelulares, su única célula detecta los cambios y elabora una respuesta apropiada.
Se dice
que es cuando una especie se extingue y probablemente su último ejemplar existente, muere. Por tal
motivo, la extinción se convierte en una realidad cuando no hay ningún
integrante capaz de reproducirse y dar lugar a una nueva generación.
Por otra parte el término extinción
también se utiliza a menudo de manera informal para referirse a una extinción local, en la que la especie deja de existir en un área determinada, aunque sigue
viviendo en otro lugar, ciertamente solo se mudan de un lugar a otro. Este
fenómeno también es conocido como extirpación.
Las extinciones locales pueden preceder a un reemplazo de la especie .Otro de
los grandes problemas que originan la extinción es cuando solo sobrevive una
reducidísima cantidad de miembros, que son incapaces de reproducirse debido a
problemas de salud, edad, distancia geográfica debido a un muy grande rango de
distribución, por falta de individuos de ambos sexos (en las especies que se
reproducen sexualmente), u otras razones.
La extinción de una especie puede provocar un efecto en cadena en su
hábitat natural, causando la extinción de otras especies del mismo. A esto
también se le denomina "cadenas de extinción”
Un aspecto importante de la extinción en la actualidad son los intentos del
ser humano de preservar a las especies que corren el peligro de extinguirse,
los únicos ejemplares existentes son mantenidos en zoológicos u otros ambientes artificiales. Algunas de estas especies están extintas funcionalmente, debido
a que ya no forman parte de su hábitat natural
y es poco probable que sean reintegradas a la naturaleza. Algunas instituciones intentan mantener una población
viable para las
especies que, si es posible, puedan reintroducirse a su estado natural mediante programas de crianza
cuidadosamente planificado.
BIBLIOGRAFÍA:
Odum, E. P. (1986). Fundamentos de Ecología. México: Interamericana.
Vásquez Torre, G. (1993). Ecología y Formación Ambiental. México: McGraw Hill.
Valverde Valdés, T; Meave del Castillo, J; Carabias Lillo, J y Cano-Santana, Z. (2005). Ecología y Medio Ambiente. México: Pearson.
Young Medina, M y Yong Medina, J. (1997). Ecología y Medio Ambiente. México: Nueva Imagen.
Leo Smith, R y M. Smith, T. ((2001). Ecología. España: Addison Wesley.